SACRO

El hueso sacro es la llave de movimiento de la pelvis, en consecuencia, de la columna por arriba, y por abajo de caderas, piernas, rodillas y tobillos.

Con una dismetria de pelvis como la de la imagen de arriba La impotencia funcional, el dolor, los problemas circulatorios, van a ser unos compañeros durante toda la vida, llevando a la cronificación y desgaste óseo por descompensación. Finalmente, osteoporosis y osteopenia.

Sea el estado en que esté el cuerpo, el osteópata actúa para decodificar esa compensación orgánica. Procede a la manipulación de los huesos iliacos, del hueso sacro, vértebras hasta el cuello, uniforma el movimiento del cráneo con el del sacro reconstruido mecánicamente.

Actúa en cadera, rodillas y tobillos, devolviendo el deslizamiento articular.

Elimina todos los procesos de contraccion/inflamación de músculos, ligamentos, fascias, y si procede, tendones.

Las nuevas tecnologías ofrecen posturas que el cuerpo no reabsorve y crea contracrura, punto gatillo y bloqueo articular.

Osteopatía y reeducación se hace necesaria.